LOS CRUELES

Susana contrata a Saverio para animar el cumpleaños de Julia. La obra es lo que sucede mientras los invitados no llegan. Una posible versión de la crueldad, inspirada en la obra Saverio, el cruel de Roberto Arlt.

«El espectáculo Los crueles, nos colocó más cerca de una experiencia "mágica", al decir de Artaud, que de una experiencia de teatro en que se "representan acontecimientos" (...) Las dobleces de la representación, o la coexistencia de dos realidades que se cruzan y que uno no termina nunca de delimitar, no son enunciadas en el espectáculo, simplemente están allí (...) Hay algo de Los crueles que sucede ahí, en el escenario, que no remite a nada exterior, sea la "realidad", sea una obra llamada Saverio el cruel. Y paradojalmente, esto no lo vuelve un hecho estético gratuito, sino que permite que la obra nos de la sensación de ser una "creación continua", un teatro que nunca es "superado por los acontecimientos". Un teatro que tiene su poder en la materialidad de esos cuerpos en el espacio que están ante el espectador, y no en "ideas" que se estén representando.

El trabajo del elenco es un valor en sí mismo y es sorprendente la unidad estética lograda (...) Los crueles es una experiencia teatral orgánica, estimulante, que permanece en el espectador días y semanas después de haberla vivido.» (Leonardo Flamia, La necesidad cruel de la creación, Semanario Voces, 2017)

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